MEDALLA DE ORO A LA PREPOTENCIA

Agentes ministeriales y federales se encañonan con rifles y pistolas en plena calle durante rabioso incidente vial

 

CIUDAD JUÁREZ.- Agentes ministeriales y federales protagonizaron una escandalosa reyerta a mano armada, para cerrar con broche de oro esta furiosa semana.

Los hechos tuvieron como escenario las inmediaciones de la PGR en Lincoln y Hermanos Escobar, donde decenas de oficiales de uno y otro bando se apuntaron con sus pavorosas  armas, como queriendo disparar.

Todo comenzó cuando un agente de la PGR que tripulaba una unidad oficial Cheyenne doble cabina, chocó contra una camioneta Nitro en Paseo Triunfo, en la que viajaba un agente ministerial con su familia,su esposa, dos hijos, una de ellos autista y su suegra. Los federales era un hombre y una mujer en activo.

Los agentes responsables se dieron a la fuga, y el conductor afectado los siguió para hacerlos pagar los daños ocurridos.

Ya encarrerado,  el ministerial pidió refuerzos y  decenas de diligentes agentes de la Fiscalía acudieron a prestar apoyo al compañero.

El federal infractor fue detenido por ministeriales muy cerca de la PGR, de donde salió una nube de federales armados para ‘salvar’ a su compañero.

Para esto, a la rabiosa escena llegaron a remachar apurados agentes de Vialidad, con lo que aquello se convirtió en un manicomio de oficiales armados , trenzados a gritos y cachuchazos.

Finalmente se impuso la prudencia, cuando jefes de todas las corporaciones intervinieron para calmar los ánimos de sus muchachos.
Si la víctima del choque hubiera sido un ciudadano común, ningún policía de ningún nivel se hubiera despeinado por eso.